La implantación de los alerones traseros móviles es sin duda una de las grandes novedades del reglamento de este año. Los pilotos podrán modificar la inclinación de su alerón trasero cuando se encuentren a menos de un segundo del coche que les precede para facilitar el adelantamiento. Pues bien, la FIA piensa delimitar un único tramo de 600 metros en cada circuito para poder utilizar el alerón. El permiso para poder activar dicho alerón lo tendrán los pilotos mediante una señal luminosa en el volante. La distancia de un segundo será medida vía satélite en la curva anterior a la recta autorizada para el adelantamiento. Además se pintarán en el suelo dos rayas blancas separadas por la distancia que recorren los coches en un segundo justo en la curva previa al tramo autorizado para el adelantamiento. De este modo, si los dos coches que luchan por una posición están dentro de esas líneas, el piloto perseguidor podrá activar el alerón en la siguiente recta. Esta medida se toma para que los espectadores lo podamos ver, ya que es imposible que veamos el aviso luminoso en el volante del piloto perseguidor.
La distancia de 600 metros se ha establecido en principio para Bahrein, si se comprobara que la distancia es insuficiente o por el contrario fuera excesiva, la FIA la modificaría en las próximas carreras. Si funciona bien, se darán un periodo de cuatro carreras antes de volver a revisar la regla.
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